Pero hoy Tengo Muy Buenas Noticias para darle.

Porque si se siente identificado con el calvario que mi madre ha sufrido durante tanto tiempo, lo que va a leer en este sitio web puede ser lo más importante que haya leído en toda su vida... La medicina tradicional aún no acierta al definir cuáles son las verdaderas causas del síndrome de intestino irritable (SII). Pareciera ser que existe una base genética que predispondría a ciertas personas a desarrollar este mal, pero esto no es 100% definitivo, ya que se considera que existen varios detonantes que pueden hacer que este síndrome avance, o al contrario, que no lo haga. Estos detonantes son el estilo de alimentación, las condiciones ambientales y la presencia de stress en el paciente. Nosotros no somos capaces de modificar nuestras condiciones genéticas hereditarias, pero lo que sí podemos hacer, son una serie de pequeños cambios "secretos" en nuestro estilo de vida y dieta, que mejorarán ampliamente nuestra situación de Síndrome de Colon Irritable (SCI) o Síndrome de Intestino Irritable (SII). Si se posee un factor genético favorable, al que se le suma un estilo de vida sedentario, más una deficiente nutrición, son todas circunstancias que van encaminadas a la aparición de distintas disfunciones digestivas que seguramente culminarán en esta molesta enfermedad. Lamentablemente, como usted debe saber, en algunos casos, los efectos secundarios que poseen los medicamentos que son recetados para controlar estas patologías, muchas veces son más dañinos que la propia enfermedad. Pero HOY ha llegado el momento de decirle basta al síndrome de intestino irritable, y decirle basta a los efectos colaterales de los medicamentos que “supuestamente” controlan sus síntomas. Yo le indicaré paso a paso cuál es el camino! Solo debe prestarme un poco de atención durante los próximos 3 minutos. Lo que va a leer es muy importante, y seguramente no lo ha leído antes porque "ellos" no quieren que usted lo conozca. Cuando hablo de "ellos", me refiero a las grandes corporaciones, como son los laboratorios multinacionales y los medios de comunicación... Antes que nada deseo hacerle saber que los tratamientos mágicos no existen, pero eso usted seguramente ya bien lo sabe. La medicina tradicional aún no vislumbra una cura definitiva para eliminar el síndrome de intestino o colon irritable, y los tratamientos que propone son solo sintomáticos, es decir, la medicina occidental receta medicamentos para paliar los síntomas que la enfermedad provoca, pero no ataca los orígenes del mal. Quienes pretenden soluciones instantáneas (o una salida mágica a su problema) son quienes degluten cantidades tremendas de medicamentos. Pero estas personas lo hacen sin conocer todos los riesgos que corren. Existen distintas clases de fármacos que habitualmente se recetan con el objeto de aminorar los síntomas del síndrome de intestino irritable. El problema es que todos ellos generan indeseables, y muchas veces nocivos efectos secundarios. Estos efectos indeseados van desde molestias gastrointestinales aún mayores, cólicos, estreñimiento, hasta las peligrosas diarreas.